COSAS A CONSIDERAR ANTES DE COMPROMETERSE¡

Una relación no siempre empieza con una idea de compromiso. Sin embargo, muchas personas piensan que el primer beso, conocer a los suegros o incluso una relación sexual son signos implícitos. ¿Cómo saber que la cosa ya "va en serio"?

Cuando pensamos que “este arroz ya se coció”.

Hay que recordar que la etapa del cortejo tiene un componente evolutivo que sirve para hacer saber a la pareja potencial que somos aptos para la crianza de las crías... por el tiempo necesario, pero no con la idea de establecer un compromiso permanente con la pareja en turno.

Los rituales de enamoramiento tienen un fuerte componente social y cultural en donde se espera que pasen ciertas cosas en distintos momentos mientras la relación progresa. Estas codificaciones no son del todo claras, aún dentro de una misma sociedad, pues así como para unos un beso es signo de compromiso, para otros el conocer a la familia del otro o poner una foto de ambos en el perfil de alguna red social es ya señal de compromiso.

¿Qué nos dice la ciencia?

El Dr. Fredric Neuman, director del centro de atención para ansiedad y fobias de los EEUU, confirma que la atracción física, los rituales de enamoramiento o la supuesta “afinidad” de dos personas cuando se están conociendo y sólo muestran su lado “brillante” al otro no son suficientes para establecer un compromiso a largo plazo con una persona, al menos no uno satisfactorio.Estos son los puntos que señala el Dr. Neuman como cruciales en la elección de una pareja para establecer un compromiso. En ocasiones pudieran parecer cosas obvias, pero frecuentemente no las observamos al inicio de la relación y, a veces, hasta vamos justificando al otro.

Atención, esto no garantiza una relación buena y duradera, pero nos aproxima a ella más que un ramo de flores o una caja de chocolates.

Aspectos a considerar:

1.Que sea una persona respetuosa y amigable

- La manera en que se refiera y trata a niños, ancianos, personas de servicio (meseros, taxistas, etc). También a animales. Una persona que trata mal o se comporta de manera ruda ante otros, muy probablemente lo acabe haciendo contigo.

2. Que tu pareja esté interesada en ti

- Si tu pareja está interesada en ti, está interesada en lo que te pasa y si esto sucede, entonces se interesará en tus conversaciones. Las parejas pasan más tiempo de su vida de relación conversando al lado de una mesa que teniendo sexo en una cama. Si además durante sus conversaciones tu pareja te hace reír, eso agrega un punto extra a la probabilidad de un buen compromiso, pues alguien que ríe contigo, no de ti, puede ser capaz de apreciar tus fallos como hechos de la vida y no como pecados capitales. Cuidado, alguien que no demuestra estar interesado en ti no es necesariamente una persona que te denigre o no te valore, es simplemente una persona que no está tan interesada en ti.

3. Que compartan las mismas ideas sobre los roles de género

- Quién hace qué cosas en distintas situaciones, desde sociales y laborales, hasta domésticas. Temas financieros, como ahorro y gasto. Cómo educar a los hijos. Temas de religión. Algo fundamental es el estilo de afrontar problemas cuando surgen. Piensa que las creencias y estilos que tu pareja demuestre durante el noviazgo ante estos temas no cambiará milagrosamente al casarse.

4. Las parejas deben tener un deseo sexual no tan divergente el uno del otro

- Si tu prefieres sexo cuatro veces a la semana y tu pareja una, con buena voluntad pueden llegar a un acuerdo en tenerlo quizá dos veces y ver de ahí cómo les funciona. Pero si ´tu quieres diario y tu pareja una vez al mes, la negociación se hace más complicada. Lo mismo pasa con los estilos en la relación sexual. Hay parejas que por cultura, creencias o valores no están dispuestas a enrolarse en ciertas prácticas sexuales que para el otro pueden ser muy normales. A veces ceden, pero eso les hace sentir denigradas o culpables.