Durante ciertos momentos o
eventos de nuestra vida, existen recuerdos, ideas, reflexiones, preocupaciones
o decisiones que se mantienen dando vueltas en la cabeza por algún tiempo. Pero
estos pensamientos nos pueden atrapar convirtiéndose en un ciclo visioso muy
peligrosos.
¿Que es la rumiación
mental?
- Esto es normal y lo que se
busca es encontrar una solución, diseñar una estrategia o tratar de comprender
nuestras emociones, lo que sucedió, sus razones o incluso las razones y motivos
de otros involucrados.
- No dejamos de ser seres que
construyen sus historias bajo narrativas para que estas tengan sentido.
- Es la reflexión repetitiva,
obsesiva o anormal sobre una idea, deliberación, o sobre una elección.
- Como una bola de nieve,
empezamos con un pequeño pensamiento y este se va expandiendo a través de
conjeturas, la gran mayoría de las veces ilógicas e irracionales.
- Los pensamientos que así
surgen, ya no tienen ninguna utilidad y propósito, surgen de manera impulsiva e
intrusiva y nos conducen a peores estados emocionales, físicos e incluso
mentales.
¿Por qué es negativa?
- Porque es un estilo de
pensamiento que ha dejado de ser adaptativo; es decir, que nos es útil para un
fin determinado.
- La rumiación nos ofrece muy
pocas oportunidades de reflexión propositiva y suele intensificar el estrés psicológico
y mental que ya de por sí traemos.
¿Cuáles son los efectos
de la rumiación mental?
1. Crean un círculo
vicioso
- Fácilmente puedes quedar
atrapado en él.
- Puede volverse una adicción
- Mientras más rumias, más
buscarás hacerlo.
2. Incrementa el riesgo
de depresión y puede prolongar la duración de episodios pre existentes.
3. Está asociada con un
gran riesgo en el consumo de alcohol.
- Frecuentemente se bebe para
acallar esas voces interiores que nos producen irritabilidad y tristeza
constantes.
4. Se asocia con un
mayor riesgo de desórdenes alimenticios
- Porque se usa la comida
como una forma de canalizar el estrés que la rumiación nos provoca.
5. Favorece el
pensamiento negativo y catastrofista.
- Se ve permeando no sólo
nuestro estado de ánimo en general, sino nuestro pensamiento y forma de ver las
cosas.
- Se contamina nuestra vida
en diversas áreas.
6. Impide la resolución
de problemas.
- Por ejemplo, un estudio
encontró que un grupo de mujeres que se detectó una masa o bolita en el seno,
esperó dos meses más para ir al médico que aquellas mujeres que no estuvieron
rumiando sobre el hecho.
7. Afecta la salud
física de los adultos mayores.
- Un estudio publicado en la
revista “Psychosomatic Medicine” y realizado por la Dra. Dorthe Kirkegaard
Thomsen, del departamento de psicología de la Universidad de Aarus, en
Dinamarca, y realizado entre 314 personas, entre 70 a 85 años, señala que la rumiación
produce los siguientes efectos en la salud, específicamente en el sistema
inmune:
- Disminución en conteos de
leucocitos, linfocitos totales y células B.
- Esta disminución no estaba
mediada por otros factores como la tristeza o la calidad del sueño.
- Es importante señalar que
un porcentaje de estos sujetos sujetos de estudio ya presentaban rumiación
desde la juventud
¿Cómo romper el ciclo
de la rumiación?
Debido a su naturaleza
adictiva, esto debe hacerse de tajo.
- Cada vez que te sorprendas
rumiando incesantemente una idea, resentimiento o pensamiento que te arrastre
negativamente al pasado, o te haga ver el futuro de manera catastrofista, sigue
estos tres pasos:
a. ¡Basta!
- Está probado que utilizar
una palabra que nos haga sentido, como “Basta”, “Para”, “Alto”... cada
vez que tengas esos pensamientos repetitivos, ayuda a detenerlos rápidamente en
el momento.
- Elige la palabra que mejor
te haga detener tu mente.
b. Cambia
- Cambia tu corporalidad;
principalmente enderezando tu espalda, colocando tu barbilla en un ángulo de
90° con relación al piso si estas de pie o sentado y tomando una respiración
profunda.
- También funciona ponerte de
pie y estirarte como si acabaras de levantarte.
- Dirige tu atención hacia
alguna actividad que nada tenga que ver con tu rumiación. Prácticamente
cualquier actividad ayuda.
c. Sigue
- Retoma la actividad que
estabas realizando de ser necesario.
- Estos pasos por sí mismos
no van a resolver de inmediato tu hábito de rumiar, pero empiezan a deconstruir
la compulsión de hacerlo, debilitando eventualmente su aparición.
Los problemas se resuelven
actuando, no pensando en actuar.
Hola Ariadna
ResponderEliminarQue interesante!...nunca me había puesto a pensar en la "rumiación mental".
Me encantó la última frase.
Mil besos.
Muy buen post. Muy interesante., Ojalá rumiáramos pensamientos psotivos y seríamos más felices y estaríamos más relajados
ResponderEliminarPor ello yo, ya no pienso.
ResponderEliminar(Pienso, de pensar, no de alimento)
Besos
Muy buen Blog Felicidades.
ResponderEliminarBuenísimo lo pondré en marcha
ResponderEliminarHola Ariadna!! Tengo 23 y hasta que leí esta publicación me he dado cuenta que rumiado casi toda mi vida, para problemas en relaciones interpersonales siempre Rumio, lastimosamente cosas negativas, es un ciclo vicioso que, en mi caso, solo me ha llevado a ideas irracionales y y como tú bien dices, no me ha brindado solución alguna, los 3 pasos que recomiendas los comencé a probar hoy mismo, y la verdad es que me han dado resultados, aunque no permanentes, inmediatos, muy bueno Tu Blog, te agradezco!!
ResponderEliminarMuy buen aporte, creo que me ha sucedido.
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